29 abril 2013

Como el ciervo huimos.







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Amapolas que son madres. Amapolas que dicen: esto no es así. Amapolas techno. Amapolas que... La amistad: ¿cuánto nos une? Queremos ser puros en este infierno (apenas un ladrido, un escarabajo, un pastel de queso, una piel de plátano, tres hombres bellos y mi amor). Amapolas que son nuestras madres y como el ciervo sobrevivimos. Sí. Como el ciervo. 

3 comentarios:

Humbert Humbert dijo...

En esas tierras de la estepa burgalesa pasé parte de mi infancia. Todavía recuerdo con emoción cuando salía a cazar ciervos al rececho con mi tío Jacinto.

La caza, el páramo desolado, el calor de un fuego, unos cuantos amigos, un poco de tabaco de Virginia, un buen güisqui y no trabajar nunca, son la mejor compañía para el hombre que busca la pureza en el infierno.

Hombre de arena dijo...

“Nous vivons tous dans un enfer dont chaque instant est un miracle”
Cioran.

Hombre de arena dijo...

Hubiese sido hermoso conocerte en alguna otra vida...