24 abril 2012

Un regalo lleno de flores.

Los días son fértiles como los bosques. Pero he dormido poco. 

5 comentarios:

Raquel F. dijo...

Plath y Hughes se ejercieron influencia mutua. Sin embargo, como comento en mi última entrada, ella ha sufrido siempre el peso de un mito que oscurece su gran obra.

Solan de Cabras dijo...

Desde luego, la influencia de este poeta menor fue devastadora para ella.
Yo a Almu le voy a regalar Caperucita en Manhattan y Diario de un seductor de Kierkegaard.

Almudena Vega dijo...

que bien, yo en Londres ya no tengo libros, los he leído todos y ocupan mucho espacio. necesito cargamento. necesito que alguien me llene los ojos de flores, también, yo.

sALÓN DE cABRAS dijo...

Fenomenal, mi querido hermanito está en la City; curr en un garito del centro (Villiers 47, embankment) y a veces pincha por ay. Es muy majo. Ahora va de Al Qaeda-garage-rocker. Si le ves, la contraseña es: te voy a facer un tatu a fuego lento por capullo.
Gracias Almu, eres un Cielo.
A ver, conocía un poeta in glés, pero los irlandeses son mucho mejores.
Los ojos de flowers, pues en ese caso tendremos que quedar en el Serpentine. Me gusta Barnes, Zadie Smith, y supongo que lgún poeta colgao habrá. El pelmazo de Newman es la sensación now.
Por cierto, no quedo con chicas qe no hayan le´do EL DON DE VORACE.

Rubén Darío Carrero dijo...

Tranquila, duerme, Ted no es nombre de poeta.