Necesito
silencio. Necesito silencio o que tú me toques en la cama. Hay sábanas. Hay
sábanas encima de sábanas y también hay gatos. En el ascensor no encontramos
espejo. En el espejo no encontramos a quién. Por qué. De dónde. He encendido la
calefacción. He comido Snickers en lugar de desayunos. He culpado al reloj. Por
qué. Dónde. De camino a casa de Stephen nos encontramos un gato. Caminaba por
la nieve sigiloso y Jordan nos dijo que no lo tocáramos. Muerde. Dice. Muerde.
Jacob abre la botella de cava y yo me siento orgullosa porque es de aquí.
Mirad, les digo, así sabe el lugar de donde procedo. Necesito silencio. Estoy
en mi cama donde tú me tocarás donde yo toco al gato donde yo toco al felino que
no muerde. Leo un poema de Ariana Reines. Leo un poema de Federico García
Lorca. Leo un poema de Roberto Bolaño. Necesito silencio. La noche cae sobre
mis sábanas con un ruido tremendo. Aquí estoy. Le espero a él y a una botella de vino. A través de las cortinas podéis
verme arder. Me enciendo contra el frío. Me restriego contra el silencio. Cuánto tiempo ha pasado. A qué hora llegas.
3 comentarios:
quisiera comentar que toqué el gato y no me mordió
Vibrando :)
http://cosadecaosytigres.blogspot.com.es/
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