29 noviembre 2008

27 noviembre 2008

Luna distante.


Matarse, dijo, en esta coyuntura sociopolítica, es absurdo y redundante.
Mejor convertirse en poeta secreto.

Roberto Bolaño

26 noviembre 2008

Don't think.

No puedes explicar el dolor que sientes cada noche al desenredarte el cabello. El mismo dolor que sufres cuando arrancas un manojo de pelos y lo tiras al váter del cuarto azul. No sabes con qué hilos de la maraña jugaste a acariciar su espalda...

24 noviembre 2008

Piano Concerto No. 1.

Juan Guerrero



Maldigo al árbol que veo desde mi ventana: verde refrescante si hace calor, óxido pálido si llueve, famélico marrón si el invierno cae.
*
Hoy, en Alcalá, ha granizado por primera vez. Al principio parecía nieve, después comenzó la lluvia y por último granizó.
*
Desde que te fuiste hace frío.
*
En la Universidad la calefacción está demasiado alta, tengo miedo de que los libros de la librería salgan ardiendo. El librero es un hombre agradable, sabe que en su espacio hace mucho calor y refrigera la sala abriendo las ventanas. Yo le llamo Guy Montag.
*
A veces maldigo al árbol: delgado pero enorme, los pájaros no acuden a él. Los pájaros huyen de sus ramas, como estrellas distantes. Los pájaros huyen de nosotros.
*
Leo Estrella distante y miro por la ventana. El librero de la Universidad me recomendó esta novela, confesándome lo que siente al leer a Bolaño. Él me llama Clarisse McClellan.
*
El árbol no se mueve cuando hace viento. Bailan sus hojas durante la quietud.
*
Tomo la una
cámara prestada. El árbol, silencioso, frente al objetivo.
*
Desde entonces hace frío.

23 noviembre 2008

Una luz extraña.

Hay una luz remota sin embargo,
y sé que no estoy solo.

JAV


Nadie muere en Madrid.
Nadie duerme solo.

Nosotros no vivimos allí.


17 noviembre 2008

Droga.


Yo estaba vivo. ¿Podía respirar? Probé respirar: no respiraba. La experiencia del deseo de insistir en la vida metiéndote más aire. ¿Podría yo vivir sin desear vivir? No respiré. En ese instante dejé de oír. “Y ahora me muero”, sé que pensé. Pero no morí: a mi cuerpo todavía llegaban las vibraciones de los sonidos bajos de la música. Era Wagner.
Fogwill


15 noviembre 2008

El Val.


He encontrado un nuevo refugio tras la ermita. Botellas, colillas, otoño seco y un banco. Nuevo refugio oscuro. Y aunque anochezca, la luz de la Virgen del Valle me ilumina como si del corazón encendido de Ajmátova se tratara.
Esta negra separación inacabable la sobrellevo igual que tú.
¿Por qué lloras? Mejor dame la mano,

prométeme venir a visitarme en un sueño.
Somos, tú y yo, como dos montañas…

Nos encontraremos, tú y yo, en este mundo.

Si sólo me enviaras, al filo de la media noche,

un saludo como una estrella.

Anna Ajmátova

14 noviembre 2008

13 noviembre 2008

Cerca de mi corazón.

Van Gogh

Alegre, Gorrión Alegre,
debajo de las hojas verdes
un capullo feliz te ve,
veloz como una saeta,
buscar tu cuna pequeña
cerca de mi corazón.

William Blake

Silueta en la hierba.
Las raíces han abierto tu garganta.


12 noviembre 2008

03 noviembre 2008

Aforismos y Newton.


Atocha. Subí al tren de las 20.09 para volver a casa. El vagón estaba lleno y me senté donde pude: al lado de un chico bajito, de unos veinte años, con ropa deportiva y mochila publicitaria. Al instalarnos, él cogió su manual de Matemáticas y comenzó a dibujar números y fórmulas incomprensibles. Tema: NEWTON. Página 243. Aunque yo llevaba un libro de Jorge Wagensberg que acababa de comprar, era incapaz de apartar la mirada de su cuaderno. Números y números. Signos y signos. Parecía un lenguaje secreto por descifrar. Miré durante varios minutos aquel espectáculo hasta que de pronto la cara del chico enrojeció y comenzó a tachar con violencia cada resultado. Mientras él suspiraba y apretaba los ojos, volví asustada a mi lectura. Aforismo 243. “Coincidencia”, me dije. La ciencia es realidad pensada, escribió Wagensberg. El pobre chaval guardó su manual. Fin de trayecto. Salió del tren arrastrando los pies. Le seguí un momento por la avenida de la estación, pero andaba demasiado rápido. A lo lejos parecía más triste. Guardé mi libro en el bolso de cuero y entonces me sentí culpable.

02 noviembre 2008

Noviembre en el Pinar.




En un abismo yo te esperé
Con el abismo yo me enamoré
Pájaro, me despertaste
Pájaro, no sé porqué
Lhasa

Pregúntenle a la ceniza
por su ritmo,

(qué obliga
a caer tan leve

qué empuja
hacia las rodillas).