27 septiembre 2012

Unas horas en Bruselas: trajes grises / Transpoesie / músculos fatigados.

Bruselas resumida a color:







Bruselas resumida en b/n:








Apuntes desde mi cuaderno oscuro.
(Barcelona-Bruselas-Bruselas-Barcelona 25-27 septiembre. Transpoesie, etc). 

Me emociono mirando hacia abajo
y lo que miro podría ser cualquier cosa
cualquier sitio
trozos verdes
marrones, más trozos verdes,
marrones, más trozos verdes
más, marrones:
ese es el lugar del que hablo,
¿lo ves?
La gran nube de Europa en el punto exacto.

***
Viene a recibirnos un cuervo pero todos aplauden. El símbolo era el gato, no el cuervo. ¿Quién decide el símbolo de la mala suerte? ¿Por qué la garra y no el pico? No sé. Ignoro la temperatura. Parece roja. Luego gris.

***
Gonzalo me cuenta cosas. Muchas cosas. Gonzalo es generoso y habla de Bolaño. Pronuncia escritores que no conozco. Tomate, mozzarella, bière blanche. La ciudad me trata bien en la noche. Aquí no hay cucarachas. ¿Te imaginas que las traigo en la maleta? ¿Te imaginas la plaga creciendo? Nuestra plaga conquistando Europa. Te echo de menos. Bebo cerveza del minibar. En las noticias hablan de España. Mi país arde. Este hotel parece un prostíbulo. Tengo sueño.

***
Todo tarda en despertar pero he encontrado la cafetería que me gustó en 2007, hay hombres más alegres aquí. Mucho más alegres que los del barrio donde duermo, barrio de trajes, barrio gris, mis botas marrones pisando el barrio gris, hombres grises, grisicitudes que miran, me miran, grisérrimos, limpios, tristes, cómo engullen, dinero, dinero, dinero. El centro tarda en despertar, me levanté a las 6:30. Ahora estoy aquí y he comprado libros viejos.

***
El hilo musical del metro a las 12: Rasputin de Boney M. Muy loco. 

***
La tele estaba tomando imágenes en el metro para mostrar a los ciudadanos de Bruselas su nuevo sistema de vigilancia o qué sé yo. La tele me pide que sonría como una buena ciudadana. Que enseñe mi ticket. Yo lo enseño. Soy una buena ciudadana.

***
Tengo que comer sola y me pierdo. Dos horas. Barrios residenciales. Abren las ventanas, catálogos de Ikea, ni un alma. Luego Merode, tiendas, más tiendas, trato de comer cerca del hotel. Un hombre de traje acaba de decir a la camarera que él me paga la cerveza. Ríe con sus compañeros. Es feo. Me bebo la cerveza. Como sola. Ya llueve. Odio este barrio.

***
Mi cabeza.

***
Las iglesias tienen forma de escarabajo. Llueve sólo dentro de los árboles. Fuera no. Extraño. No hay niños. No hay.

***
Siesta.

***
Siesta corta, no puedo hablar contigo, quiero hablar contigo, quiero contarte lo que me ha pasado en el restaurante. Te echo de menos.

***
Instituto Cervantes y luego la inauguración de Transpoesie en Botanique. Conozco al poeta de Rumanía. Se llama Radu Vancu. Bebo agua con gas.

***
Passa Porta es una especie de cápsula temporal maravillosa. Muchísimo público (muy joven), muchísimos libros, conversaciones interesantes, hablamos de Europa. No nos gusta Europa. O sí. No lo sé. No lo sabemos. Radu Vancu, Onno Kosters, Gueorgui Konstantinov, Mevlut Ceylan, Eric Piette y Xóchil A. Schutz. Me interesan especialmente las voces de Radu, Onno y Xóchil. Con los dos últimos tengo la oportunidad de hablar en el bar: los temas de David Foster Wallace, la traducción, la crisis, Ingeborg Bachmann y las generaciones salen a la mesa. Luego más cerveza y risas con Margarita y sus amigos. Por la noche todo cambia. Hay gente borracha. Hay música que sale de las alcantarillas. Quiero ir a una fiesta pero tengo que madrugar. Hablo de política con Sarah. Son las dos de la madrugada. No he cenado. 

***
Aeropuerto. Ocho euros: cocacola y bocadillo de queso. Ahora sí que soy pobre. Y qué mal sabe. 

***
Otra vez cuadrados: 
trozos:
marrón:
gris:
me duermo:
el mar:
piloto al habla, cuenta que eso de ahí abajo es Niza. ¿Niza? ¿Eso es Niza?
distingo la silueta de la ville
duermo
los pirineos
el cielo no tiene ni una sola nube -mi país arde porque no hay nubes que lo resguarden-
-la lluvia resguarda-
-aísla- 
Barcelona,
vas a estar allí cuando llegue,
ya llego
no hay hambre
estoy

5 comentarios:

Liese dijo...

Qué bien.

Ula dijo...

Cuando viajaba yo por Europa y América, con tu edad más o menos, me hacía preguntas parecidas pero noto que ahora son más desoladoras, con menos esperanza, por eso, mi niña, tendrás que currar más y tirar palante.
Ánimo, muchacha.

Saludos

Radu Vancu dijo...

Impressive reading, Luna, I was deeply moved by your beautiful poems (especially when they spoke about a piece of sugar). :)

Unknown dijo...

Gran entrada. Un collage delicioso y demoledor del pulso del silencio del que, en soledad, se sabe acompañado. Bravo

Anónimo dijo...

Luna, te vi en la Passa Porta le 26 septiembre. Fuiste muy interesante. Radu Vancu fue estupendo tambien. Soy traductora polaca y a veces escribio para revistas culturales.
Catalina