16 agosto 2009

Mate en el Lago.




Los mosquitos del lago son diminutos. Hablan raro. No los entiendo. Intento conjugar sus alas. Intento que olviden mi sangre.

9 comentarios:

Taun dijo...

¿Muerte en el lago?
Qué macabro.
Con niños y todo.

Luna Miguel dijo...

bueno, me refería a Mate, la bebida argentina (mi familia es argenina, la que vive aquí en Munich)

Pero también muerte. La de los mosquitosss.

Anónimo dijo...

Niña, eres verdaderamente insufrible. Tu blog y tus textos en Público confirman lo que todos sospechábamos: eres una pura mediocridad.

Luna Miguel dijo...

Uf, hoy tenía un poco de dolor de tripa, será esa mediocridad de la que hablas, me está destrozando el estómago.

Víctor dijo...

Algunos comentarios sí que son insufribles y tan sólo demuestran mediocridad o algo peor.

Portinari dijo...

Luna, que los mosquitos no tomen tu sangre.

Así que en Munich; por otra parte, hablando alemán con los mosquitos quizás te entiendan ;) coge mis palabras al vuelo.

¿Va todo bien por allí? espero que sí.

Anónimo dijo...

Vaya, amigo ¿Qué nece(si)dad tienes de escribir aquí eso? ¿Y quiénes son todos, padre?

Luna, que esta gente no te haga eliminar los comentarios, ánimo.

Óscar Santos Payán dijo...

Anónimo: Si tienes heces en la boca vete a un vomitorio y échalas. Y si escribes di quién eres patán descerebrado. Qué fácil es ¿Verdad? Esconderse y criticar.

C.Azpilicueta dijo...

Pero a mi me gusta el Anónimo. Lo imagino fácilmente, de muchas maneras. Podría ser una serie de personajes, no uno slo. Se lo diré a Perec.
Por ejemplo está sentado en un ordenador del trabajo, o en su casa, quizás esté de baja, nunca de vacaciones. Está escarbando, disimuladamente, sin revelarse, en Internet, buscando huecos por los que perderse de si mismo, vomitorios o ventanas. Lo veo triste, asustado. Su rabia es un desagüe lento, atascado. Internet le ofrece un mundo irreal, sin olores.
Tu debes parecerle un ruiseñor.
No creo que haya leído a Lee.